Houston (EE.UU.). (EFE).– Se cumplieron los pronósticos y la Serie de Campeonato de la Liga Nacional tendrá como protagonistas a los Dodgers de Los Angeles y los Bravos de Atlanta que lucharán por el banderín de campeones después de haber conseguido sendas barridas (3-0) en sus respectivas Series de División frente a los Padres de San Diego y los Marlins de Miami.
Ahora, todo está listo en el Globe Life Park, de Arlington (Texas) para que a partir de este lunes se enfrenten los dos equipos que poseen las mejores ofensivas de las Grandes Ligas y también tengan dos rotaciones de abridores intratables.
Con la única diferencia a favor de los Dodgers, que poseen mayor experiencia en la competición de los playoffs después que han disputado dos de las tres últimas Series Mundiales, ambas con derrotas (2017 y 2018).
Pero los Dodgers jugarán la Serie de Campeonato del Viejo Circuito por cuarta vez desde el 2013.
El equipo de los Dodgers cuenta con una alineación profunda y poderosa que lideró el béisbol en carreras anotadas, y Atlanta anotaron sólo una carrera menos que el equipo angelino esta temporada.
Los Dodgers tienen entre sus toletes de poder a Mookie Betts y Cody Bellinger, pero los Bravos poseen a Freddie Freeman y al venezolano Ronald Acuña Jr.
Además de los fuegos artificiales que se esperan, también será clave la serpentina que viaje desde lo alto del montículo entre el zurdo estelar Clayton Kershaw y Walker Buehler, de los Dodgers, y la joven pareja de los Bravos integrada por Max Fried y el novato Ian Anderson.
Las combinaciones de choque aventuran una serie de poder desde el inicio y serpentina de alta calidad, pero los números y probabilidades indican que los Dodgers tienen un 73,3 por ciento de posibilidades de ganar la serie y avanzar a la Serie Mundial.
Lo anterior porque la profundidad y la versatilidad que caracteriza a los Dodgers les ha permitido tener una racha prolongada estando entre los mejor equipos de las Grandes Ligas.
Los Dodgers puede cambiar de forma y prosperar en cualquier entorno, pero el formato de postemporada socava estas fortalezas de organización, así que una posible serie de siete juegos, se da la oportunidad de que brille todo el roster de los Dodgers.
Aunque los Bravos tienen un cuerpo de lanzadores equilibrado, los Dodgers cuentan con más armas de las que realmente pueden esperarse en una serie de postemporada, ya que pueden personalizar su combinación para cualquier estrategia.
Con sus jardineros estelares, Betts, el gran fichaje del descanso invernal, que podría comenzar en la segunda base, y el central Bellinger, quien ha pasado gran parte de su joven carrera como primera base con una categoría de Guante de Oro, son sólo dos peloteros de todo un cuartel de alta calidad de los Dodgers.
El equipo angelino de la Liga Nacional cuenta con más profundidad que el resto de las franquicias de las Grandes Ligas, pero particularmente más que los Bravos, quienes usan una alineación fija todos los días.
En la defensa, los Dodgers y los Padres se hicieron mucho daño con las pelotas largas durante su enfrentamiento en la serie de División, en Arlington (Texas), pero según los estándares del campeonato del 2020, el campo donde se jugará la serie de Liga parece un estadio de jonrones difícil.
Además del lugar que impediría la presencia de jonrones, se presenta la fortaleza de ambos cuerpos de lanzadores de mantener la pelota dentro del campo de juego.
Los Dodgers lideraron las mayores al permitir solo 1.55 carreras por partido a través del jonrón; los Bravos fueron quintos con 1.77.
Mientras que los Dodgers permitieron 2.00 carreras por partido sin jonrones, ocupando el cuarto lugar en las mayores, y los Bravos se colocaron en el puesto 22 en esta categoría
De acuerdo con las carreras defensivas salvadas, los Dodgers ocuparon el segundo lugar con más-menos 29, mientras que los Bravos fueron vigésimos primeros con más-menos 8.
Los equipos estuvieron cerca en carreras salvadas a través de cambios, por lo que la diferencia estaba en los jugadores. Los Ángeles tenían la ventaja en seis de las nueve posiciones, incluidas las ventajas de 19 carreras tanto en la segunda base como en el jardín derecho.
El formato de los playoffs de esta temporada evidenció que hubo más equipos mediocres en la postemporada que nunca.
Los Bravos son un equipo sobresaliente, sin embargo, no se sabe exactamente del dominio de Atlanta durante las dos primeras rondas.
Incluyendo los playoffs, los Rojos de Cincinnati y los Marlins de Miami, se combinaron para ir 64-63 y fueron superados por 54 carreras.
Los Bravos aún no se han encontrado con un oponente de alta resistencia en la postemporada.
Los Dodgers se enfrentaron a los Cerveceros de Milwaukee, que tenían una serie de lesiones, y después tomaron un descanso cuando los dos mejores lanzadores de San Diego, Mike Clevinger y el dominicano Dinelson Lamet, se lesionaron.
Pero los Padres fueron un club de elite, especialmente en la ofensiva, y aun así los Dodgers los superaron con facilidad.
Los Bravos se han visto muy bien hasta ahora en los playoffs, pero no se han enfrentado a nadie de la talla de los Dodgers.