¿Aceptará Cabrera que el partido de Leonel decida quién será el presidente de la Circunscripción dos de Santo Domingo Este?.
Por Orlando Pimentel
Desde que se anunció la tentativa de renuncia por parte Cabrera a la presidencia de la Circunscripción 2 de Santo Domingo Este, los dirigentes de la Fuerza del Pueblo han orquestado una excelente campaña para crear conflictos dentro del PLD.
El partido verde ha copado las redes sociales y grupo de WhatsApp proponiendo una persona que abandonó hace una década su espacio en la circunscripción dos de Santo Domingo Este.
La persona propuesta por la Fuerza del Pueblo es una persona que fue vicepresidente de la circunscripción hasta la fecha en que abandonó ese cargo, luego de perder su condición de regidor.
Alrededor de 4 o 5 ingenuos han comprado la idea de la Fuerza del Pueblo de que ese ex vicepresidente asuma el cargo, porque supuestamente nunca renunció y que supuestamente se deben respetar los estatutos, sin embargo, los estatutos establecen claramente cuando alguien queda fuera por abandono.
Ramón Cabrera que ama a su partido cedió el espacio sin la palabra irrevocable para darles paso a otros que puedan desempeñar el trabajo con más facilidad que él, jamás con la intención de crear una crisis en la circunscripción.
Ningún dirigente que respete su partido y tenga deseo que regrese al poder se puede sentir cómodo de que se premie la vagancia y el irrespeto a su organismo.
Por más deseo que los dirigentes de ese partido tengan de indultar a quienes abandonaron, no se bajaran los pantalones para que alguien que no estaba luchando cuando sacaron a ese partido del poder venga a dirigirlo.
En ese escenario donde el vicepresidente abandonó y el secretario de organización cambio de partido, quedaría en mano de Winston, quien es de Asuntos Electorales, pero Winston entendió que la idea es trabajar y delegó en Rafael Castillo.
El problema es que Castillo puso como condición para aceptar el cargo es que sea por consenso y según mi fuente la influencia de la Fuerza del Pueblo rompió el consenso.
Ante esa situación le quedan al PLD dos opciones
1) Sería que Cabrera no asista a la reunión y los dirigentes comprometidos con el trabajo político se bajen los pantalones y permitan que pase la propuesta de la Fuerza del Pueblo, que es nombrar como presidente a un ex vicepresidente, que en la última década estaba tranquilo en su campo, pero esa opción traería una crisis sin precedentes
2) La opción que pondría fin a la crisis es que Cabrera posponga su renuncia y se sacrifique seis meses más por el Partido de la Liberación Dominicana
